(Blog) Cuando la utopía de un mundo mejor se hace realidad
Es increíble: me fascina ver cómo trabajan las hormigas, tan pequeñitas y organizadas, sabiendo muy bien cuál es función, trabajan en silencio y pasan casi inadvertidas, pero así constantes y tenaces y al final su esfuerzo será recompensado, dará sus frutos.
Escrito por: Montserrat Sánchez
Lo que inició un religioso bondadoso hace 150 años hace creer en los milagros, pero no sólo rezando sino con el esfuerzo y el gran sacrificio, poniendo en peligro y en riesgo los ahorros de toda la vida, la salud mental y la física. Es lograr el sueño americano de toda la vida, pero a diferencia de otros empresarios, a veces sin escrúpulos, llevados por la codicia, destruyen el medio ambiente y todo lo que pisan, haciendo así que no se respete ni que sea de forma colectiva ni equitativa las ganancias, las oportunidades ni la repartición de la riqueza que respeta ni de la Madre Tierra.
Un claro ejemplo lo tenemos en Catalunya con la cooperativa "La Fageda" que encadena el 3º puesto en el ránquing de ventas de yogures en toda Cataluña. Donde no existe la gente con enfermedades mentales ni con discapacidad sino personas "con capacidades diferentes", dónde una vez un médico se atrevió a transformar el mundo de la salud mental, ayudando así a nuestro colectivo, tan desprotegido, tan invisible y tan poco aceptado en esta sociedad. Devolviéndoles la dignidad, dándoles la oportunidad de sentirse como otra persona cualquiera más, valorado y respetado y, cómo no, realizado como todo ser humano.
Y es así que la utopía de un mundo mejor cobra sentido, donde los sueños a veces se hacen realidad. Sólo tienes que luchar por un mundo más global y pensar de una forma que no sea la individual para prosperar y mejorar en la vida. Acuérdate siempre de ser hormiga.